¿CÓMO NACIÓ SARCÁSTICA?
Era casi Navidad del 2017, por lo que estaba más que claro que había llegado el momento de encontrar agenda para el siguiente año. Siempre he comprado agendas. No llego ni a marzo en su uso, pero qué diablos, yo me compro una siempre. Me ayuda en ese proceso unicorniano de sentirme más organizada con mi vida! Es que yo soy una soñadora! Recuerdo haber ido, entusiasta, saltarina, afanosa, a mi "centro comercial más cercano" a por mi agenda 2018, haber encontrado las típicas agendas de siempre y haber expresado un dulce y sutil "¡me cago en la puta!". Un susurro. Lo dije bajito, bajito. Una insignificante irreverencia a modo de protesta. Sí, eso dije. Yo soy bien lisurienta y dado que esta es mi página, pido respeto y tolerancia por mi francés. Solo como un paréntesis, confío más en las personas lisurientas... mi psicóloga es medio lisa y conecté con ella desde el inicio. Siento que la gente que se permite soltar una lisura por ahí, es más honesta y más libre. Me gustan la sinceridad y la libertad de expresión...
Revisé las agendas, más aburrida que en pelea de babosas. Lo mismo de siempre. La agenda de Paulo Cohelo y sus frases reflexivas profundas (siento que ese tipo donó su ADN y pum! nació Ricardo Arjona...), la del Principito, la de Mafalda, la de Mickey Mouse, la de Pascualina (que creo que ya se va por los 40), y maldita sea, las agendas de flores!!! (esas deberían prohibirse por agresión a la estética y al buen gusto). No me sentía identificada con ninguna... les faltaba personalidad, les faltaba sabor,
un poco de ¡zá-zá!, 10 céntimos de sazón...
Yo no sé que hacen ustedes los 25 de diciembre, yo en lo particular dedico mi día a la oración, a la reflexión, a la reconciliación y al perdón de mis pecados... jajajaja... Mentira. Eso solo lo hago en Semana Santa (me voy a ir al infierno por estas bromas). Ese 25 de diciembre me dediqué a diseñar mi propia agenda, una agenda que tenga mi personalidad, que me provoque pasar las páginas, que me haga reír, que sea divertida, diferente, irreverente, no el clásico motivacional, una agenda que rompa esquemas y que me arranque una risa con solo pasar las páginas. Una agenda PARA MÍ.
Lo cierto es que nunca diseñe la agenda pensando en venderla, esa agenda era solo para usarla YO. Lo que no preví es que algunas de mis personas me dijeron: "Quiero una para mi". Y así es como, en vez de imprimir un ejemplar, imprimí siete. Siete. Solo siete. Quién hubiese pensado lo que estaba por venir...
Hoy la agenda Sarcástica está a la venta a nivel nacional por acá, a través de la web y nuestras redes sociales. Si buscas, como yo, una agenda distinta e irreverente, una libreta que te alegre el día y te sorprenda, un planner que te provoque mostrar o un cuadro que le muestre al mundo tu tipo de sentido del humor... este es tu lugar...
Bienvenida, Sarcástica.